En principio, para que la FIVA (Federation Internationale de Vehicules Anciannes) otorgue a un auto un carnet que lo certifique como clásico éste debe cumplir 30 años y mantener su originalidad. Pero esta condición es necesaria pero no suficiente. Para que un auto de alredededor de 20 años, tenga un valor de estable a ascendente en un determinado mercado debe cumplir una serie de condiciones mas. Vamos a ir de lo general a lo particular, filtrando características:
1- Tipo de auto:
Si es sport, mejor. Por lo general una cupé de fines de los ´90 fue comprada como segundo o tercer auto de la familia, en sus primeros 10 años pudo haber sido del mismo dueño y puede haber recorrido pocos kilómetros. Si es cabrio, targa, convertible, descapotable, spider, speedster o como lo haya llamado su fabricante, duplica puntos letra, como diría el clásico Scrabbel.
2- Marca y modelo:
Hay muchos autos que comparten motores o fabricantes, pero si tienen un caballito, un toro o un felino sobre el capot, suman puntos sin importar su modelo. Por supuesto que además de Ferrari, Lamborghini, Jaguar o Aston Martin que ocupan buena parte del paraíso, hay un coro de ángeles sobre el cielo de Berlín que pueden ser atractivos accesos a este mercado, dependiendo del modelo, como ejemplos: Audi TT, Mercedes SLK, BMW Z3 y Porsche Boxster. Hay modelos que se fabricaron por millones y no tienen valor de portfolio, pero que han tenido versiones especiales como por ejemplo, versiones de Rally de Renault 5, Lancia Delta o Peugeot 205, pero atención, leer el punto Nro3.
3- Condiciones generales:
Un auto de una versión especial pero no muy bien mantenido o con muchos kilómetros puede ser como una Sirena para un marinero en alta mar. La emoción de haber encontrado un proyecto especial, "que si le pongo tiempo y dinero sin apuro, haré un gran negocio..." puede convertirse en la expulsión del paraíso mas rápido de lo que podrías creer. La mayoría de las veces es mejor inversión adquirir un auto "menos especial" en estado de exposición, que una figurita rara "que sólo le falta cariño", con sólo mirar el valor de primeras generaciones de Chevy o Torino W380, inmaculadas podrán confirmar ésto.
4- Condiciones particulares:
Esta es la letra chica. Un auto que perteneció a un famoso, tiene un historial deportivo o fue premiado en eventos de elegancia, no es garantía "contra todo riesgo". Cada caso debe ser tratado en su individualidad. Recuerdo que hace unos años salió publicado un VW Golf que había sido propiedad del Papa Benedicto XVI. En ese momento fue una nota de color y pudo haber tenido un valor superior coyuntural, pero lo digo sin chequear, no compren el ex auto del Papa Francisco, no les abrirá el portón del garage de los cielos.